Una enfermedad inusual está aumentando en los Estados Unidos, especialmente en los estados que han legalizado la marihuana. Los consumidores habituales de cannabis se presentan en las salas de emergencia quejándose de malestar intestinal severo.
"Se retuercen, se sostienen el estómago, se quejan de un dolor abdominal muy intenso y náuseas", dijo el Dr. Sam Wang, especialista en medicina de emergencia pediátrica y toxicólogo del Children's Hospital Colorado, que trata a adolescentes con la afección.
"Vomitan y luego continúan vomitando todo lo que tienen en el estómago, lo que puede durar horas", dijo Wang. "A menudo dicen que se dieron una ducha de agua caliente antes de llegar a la sala de emergencias, pero no sirvió de nada.
"Ahí es cuando sabemos que podemos tener un caso de síndrome de hiperemesis por cannabis, o CHS".
El síndrome de hiperemesis por cannabis irrumpió en la escena médica en 2004, cuando un grupo de investigadores australianos escribió sobre 19 consumidores crónicos de marihuana que habían tenido episodios repetidos de dolor abdominal y arcadas.
Los investigadores siguieron a nueve de los pacientes a lo largo del tiempo y encontraron que los síntomas desaparecieron cuando se suspendió el consumo de cannabis, pero regresaron cuando se reinició.
Curiosamente, más de la mitad de los 19 informaron haber usado baños o duchas extremadamente calientes para autotratarse sus síntomas. A medida que comenzaron a aparecer más casos del síndrome de hiperemesis por cannabis, el baño caliente como tratamiento en el hogar se convirtió en un tema recurrente.
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