La historia de Ecuador se puede dividir en seis eras: Precolombina, Conquista, Período Colonial, Guerra de la Independencia, Gran Colombia, y Simón Bolívar la separación definitiva de su visión en lo que hoy se conoce como República del Ecuador.
El Imperio Inca
Según cuenta la leyenda, Manco Cápac y Mama Ocllo surgieron del lago sagrado Titicaca como una pareja divina y que se dirigieron hacia el norte, donde fundaron la ciudad de Qusqu (Cuzco) que significa "el ombligo" o "centro del mundo" (capital de Tahuantinsuyo) alrededor de los siglos XI y XII d.C. El dios Tiqsi Huiracocha les entregó un bastón de oro con el que se dedicaron a fecundar la tierra creando ríos, haciendo crecer nuevas plantas y otros beneficios para que pudieran vivir y disfrutar los mortales.
El imperio Incaico o Tahuantinsuyo, que en quechua significa Cuatro regiones unidas, llegó a abarcar gran parte de lo que actualmente son Ecuador, Colombia, Perú, Chile, Argentina y Bolivia.
Esta sociedad fue un admirable ejemplo de organización político-social, con grandes conocimientos de arquitectura, ingeniería hidráulica, medicina, agricultura y pesca.
La Conquista
A la muerte de Huayna Cápac, el undécimo emperador inca, y bajo su voluntad, se repartió el imperio entre sus hijos: la zona sur para Huáscar y la zona norte para Atahualpa. Estos hermanos se enfrentaron entre sí, iniciando una guerra civil en la que finalmente salió triunfador Atahualpa.
Una vez terminada la guerra entre los dos hermanos, conocido el resultado y las consecuencias funestas, Francisco Pizarro (que se encontraba en Túmbez, tras fundar a poca distancia de ésta la primera ciudad española de América del Sur, San Miguel) solicitó entrevista con el emperador. Éste se encontraba en Cajamarca (Perú) y sin saber las verdaderas intenciones de Pizarro accedió, cayendo en su trampa y quedando prisionero.
Desde su prisión, Atahualpa dio la orden de asesinar a su hermano Huáscar y de traer oro de todo el imperio. Había pactado su libertad y esta consistía en llenar su celda de oro hasta la altura de un hombre con los brazos alzados. Una vez repartido el oro, "los conquistadores" faltaron a su palabra y condenaron al emperador a morir quemado, acusándolo de preparar una conspiración contra ellos. Varios meses pasó el inca prisionero y a última hora aceptó ser bautizado, pero esto no fue suficiente y tras acusaciones de fratricidio, poligamia, incesto, idolatría y de conspiración contra los españoles, Atahualpa fue ejecutado, muriendo ahorcado y no en la hoguera.
La Independencia
Lo que hoy conocemos como Ecuador tuvo bajo la colonización española numerosos gobiernos, perteneciendo primero al Virreinato de Perú hasta mediados del s. XVIII y más tarde al de Nueva Granada.
A principios del s. XIX y a raíz de la invasión napoleónica de España, un grupo de patriotas, liderados por Juan Pío Montúfar y Francisco Eugenio de Santa Cruz y Espejo ve una oportunidad de conseguir la tan ansiada independencia. Se proclamó la República de Ecuador en agosto de 1.809, pero la rápida y enérgica respuesta del ejército colonial impidió que se llevase a cabo.
Los ecuatorianos tuvieron aún que esperar hasta el 24 de mayo de 1.822 para conseguir la ansiada independencia de España. En esta fecha tuvo lugar la Batalla de Pichincha, en la que gracias al auxilio de las tropas enviadas por Simón Bolívar y lideradas por el general Antonio José de Sucre, se consiguió la libertad. El territorio se incorporó a la Gran Colombia, formada por Colombia, Venezuela, Panamá y Ecuador.
Transcurridos ocho años, Ecuador se independizó finalmente y se constituyó como la República de Ecuador con el general Juan José Flores como presidente. Un año más tarde y tras la independencia asímismo de Venezuela, la Gran Colombia se disolvió, llevando a su fin el sueño de Simón Bolívar el Libertador.
En 1948, Ecuador devino uno de los miembros firmantes de la Carta de la Organización de los Estados Americanos. Pero lo que marcó sobre todo la política exterior de Ecuador fue un conflicto fronterizo con Perú, que había comenzado en 1941. En efecto, en esta época, Perú había invadido Ecuador por el sur, en la región amazónica; la guerra que resultó se acabó con la firma de un tratado (1942), que atribuyó a Perú la mitad del territorio ecuatoriano y casi la totalidad de su selva amazónica. El conflicto se reavivó en 1950 y en 1960.
Los años '70 vieron el apogeo de la explotación de los yacimientos petroleros ecuatorianos. El país se volvió el segundo más grande exportador de petróleo de América Latina, después de Venezuela. Sus ingresos petroleros le procuraron divisas extranjeras y los fondos de inversión de los cuales tenía gran necesidad, pero estimularon también la inflación y aumentaron las desigualdades sociales.
Un referendum sobre el proyecto de una nueva constitución y la puesta en marcha de una elección presidencial futura se desarrollaron en 1978. Fue Jaime Roldós Aguilera quien fue elegido en 1979 y la nueva constitución tuvo efecto. En el exterior, un comienzo de lucha fronteriza degeneró en conflicto armado con Perú, y acabó en marzo de 1981, por arbitraje internacional.
En mayo de 1984, León Febres Cordero Rivadeneira devino nuevo jefe de estado ecuatoriano; orientó su política económica hacia un cierto liberalismo. Pero su gobierno debió hacer frente a rebeliones militares repetidas, entre ellas una revuelta en enero de 1987.
En 1992, Sixto Duran Bellen accedió a la presidencia. Su mandato estuvo marcado, en enero de 1995, por nuevas tensiones fronterizas con Perú, que se intensificaron cuando estallaron conflictos violentos entre las fuerzas militares de cada país. El territorio disputado cubría una superficie de 340 km2 en una región montañosa que permitía una salida por el Amazonas y que era sobre todo una región rica en recursos naturales. Se desarrollaron combates entonces a comienzos del mes de enero. Un cese del fuego fue firmado en marzo, bajo el arbitrio de Brasil, Estados Unidos, Chile y Argentina, a fin de permitir la celebración de negociaciones pacíficas. Fue creada una zona de desmilitarización, pero las tensiones persistieron. En el plano económico, Sixto Duran Ballen instituyó una ley de desarrollo agrario; la situación mejoró, en particular gracias al sostenimiento del crecimiento económico.
Electo para la presidencia de la república en julio de 1996, Abdala Bucar'm Ortiz mostró un comportamiento personal por lo menos excéntrico y puso en marcha un programa de austeridad que llevó a un crecimiento vertiginoso de los precios. El 5 de febrero de 1997, los sindicatos pusieron en marcha una huelga general y, dos días más tarde, el Parlamento, cediendo a la presión de los manifestantes, destituyó a Bucar´m por incapacidad "mental y física"; fue elegido Fabián Alarcón presidente interino, mientras que la vice-presidente Rosalía Arteaga se autoproclamó presidente.